jueves, 2 de mayo de 2013

UEFA Bundes League


Después de las semifinales de Champions tenemos que se confirmó lo que vimos en la ida. El Dortmund, con bastante drama, y el Múnich, por goleada, certificaron su lugar en la final que se disputará en Wembley el próximo sábado 25 de Mayo.
A pesar de que los globales se ven muy distintos, me parece que la superioridad alemana fue rotunda sobre los clubes españoles que quizás ya estaban pensando en esa final con clásico español antes de disputar sus partidos correspondientes.
Gesta engañosa – El Real Madrid jugó el martes de local contra la joven plantilla del Borussia Dortmund que llegaba con una renta de 3 goles luego de vencer en su estadio 4-1 y mostrando una superioridad táctica y futbolística enorme sobre los merengues.
Los primeros 15 minutos fue todo lo que el club y los aficionados que se dieron cita en el Bernabéu pudieron desear, bueno, casi todo ya que a pesar de múltiples ocasiones claras no pudieron concretar el primer gol en busca de una remontada histórica.
Minutos iniciales de todo vértigo, todo velocidad y todo presión sobre un Dortmund que quizás le estaba pesando un poco el ambiente y los nervios de estar tan cerca de lograr algo tan importante. Cristiano, Higuaín y Ozil fallaron ocasiones muy claras, de haber concretado alguna de ellas creo que la historia sería distinta.
Pero después de estos 15 minutos se acabó el Madrid, los defensores del Borussia supieron marcar mejor las corridas de los atacantes merengues y arriba Lewandoski estaba haciendo un partido fantástico con y sin la pelota. Dejando a Sergio Ramos evidenciado y la única forma de detenerlo fue a base de patadas y codazos, de chiste que el de Camas terminara la primera mitad sin ser expulsado.
En el segundo tiempo salió mejor todavía el conjunto visitante y dispuso de incontables oportunidades de marcar el gol  que sentenciaría la eliminatoria pero entre malas definiciones y buenas intervenciones de Diego López se mantenía el cero y la esperanza del Madrid, aunque el público ya había quedado muy silenciado ante la clara superioridad germana.
A 10 del final en casi la primera llegada del segundo tiempo por parte de los de Mourinho Benzemá remata en el área chica un buen centro desde la derecha y volvían las esperanzas blancas. El público despertó, los jugadores fueron con más fe y pundonor que fútbol y funcionó. Ya que en un asedio de casi 3 minutos donde la pelota no salió muy lejos del área grande alemana, Sergio Ramos define con un fuertísimo zurdazo al borde del área chica.
2-0 y parecía que iban a lograr la hazaña a pesar de no haber jugado “fútbol” más de 20 minutos de los 180 de la eliminatoria. Al final no pudo ser y el Madrid quedó en la orilla y el público se los agradeció pero me parece que el resultado le hace flaco favor a los merengues. Pues el resultado tuvo que haber sido mucho más abultado a favor del Borussia Dortmund quien dominó de principio a fin la eliminatoria y evidenció la falta de argumentos futbolísticos del Real Madrid. Parece que cuando el duelo es físico y el juego es correr el Madrid es el mejor de todos, pero cuando hay que jugar con idea, tener un buen parado táctico y buena movilidad del balón, los merengues brillan por su ausencia y falta de ideas.
Baño de humildad – El 7-0 en el global que consigue el Bayern de Múnich es el resultado directo de la buena planeación y ejecución de un equipo para una temporada.
Los bávaros habían sufrido el duro golpe de perder la final pasada en penales frente al Chelsea en su propio estadio. Pero realizando ajustes en posiciones específicas, alternando bien a los jugadores para mantenerlos descansados pero también motivados y con un nivel de competitividad alto.
Por su parte, el Barcelona planeó de pobre manera su temporada y la ejecutó aún peor. La pasada campaña había quedado a la orilla de la final de la Champions y su eterno rival le ganaba la liga sentenciando en su propio estadio. Además de la salida de Pep Guardiola sin duda se tenía que buscar dar un golpe para evitar la caída.
La directiva no hizo caso a esto y pensó que manteniendo el modelo y la plantilla se podría dar vuelta a una situación adversa. Adquiriendo únicamente a un medio centro defensivo y nada más.
Tito no tuvo tantas ideas o la claridad de las mismas que tenía Guardiola. Obligando a usar a su 11 de lujo durante casi todos los encuentros en todas las competiciones, generando así diversas lesiones musculares y la falta de forma del “plantel B”.
Más alarmante que esto fue la falta de soluciones ofensivas, pues parecía ser que la instrucción táctica era “dénsela a Messi y ya que el vea que hace”. Es cierto que un equipo que cuenta con una estrella de esta magnitud siempre va a depender de él, pero no se pueden permitir el lujo de no tener ningún planteamiento distinto para enfrentar adversidades.
El Barcelona necesita dos cosas, más defensores (de corte defensivo, no como Jordi Alba) y más músculo. Ya que hay muchos encuentros que se ganan o pierden a base de fuerza en la mitad del campo, donde el Barcelona carece de mucha presencia física.
También se le debieron dar más minutos a Thiago y Song, inclusive en algún partido pudo salir con Song acompañando a Busquets para asegurar el medio campo.
Cesc no debe de jugar como “falso 9” ni como “extremo lento”, su lugar es en el medio del campo con libertad de movimiento, tal como la tiene Xavi hoy en día. El bajón de éste último durante la temporada ha sido grandísimo, quizás la cantidad de partidos y la edad empieza a pasarle factura al de Terrassa.
Volviendo al partido de Champions, cuando un equipo con grandes jugadores y muy buena planeación y ejecución futbolística se enfrenta contra uno que no la tuvo el resultado es lo que vimos. Una paliza histórica y un buen baño de humildad que les hace bastante falta a los culés.
Final Bávara – Borussia jugará contra el Bayern Múnich. Los de Heynckes buscarán el famoso “trébol” alzándose con la liga, la copa local y la Champions league, hito que no ha conseguido nunca ningún conjunto alemán.
Por su parte el Dortmund busca encumbrar esta fantástica generación de futbolistas y la grandísima visión de campo de su entrenador Jurgen Klopp antes de que todos abandonen la institución. Recordemos que por problemas económicos es muy probable que el club se vea obligado a vender a todas o al menos la mayoría de sus figuras de cara a la próxima campaña.
Será un buen partido, son dos clubes que defienden muy bien y atacan mejor. Cómodos con y sin la pelota, adaptables a los momentos y circunstancias de cada partido y con dos entrenadores que entienden y mucho de fútbol y tácticas. Difícil pronosticar un ganador, ya que las finales se suelen definir por pequeños detalles, buenos o malos. Me daría gusto que fuera campeón el Borussia Dortmund, pues tanto el equipo como la afición han sufrido demasiado últimamente y una alegría de este tamaño les vendría fantástico.

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